La comunicación es una necesidad del ser humano, le es innato, propio y es el elemento diferenciador con las otras especies vivas. La inteligencia y las emociones se crecen a través del lenguaje. La escritura es la forma de asegurar la permanencia en nuestros mensajes. Desde tiempos muy remotos el ser humano se dio cuenta de que no bastaba con comunicarse, debía encontrar la manera de organizar, normalizar y dar permanencia a los mensajes. Se han encontrado escrituras primitivas que dan fe de esto, desde luego ha habido una evolución y ese es el tema central de la pregunta.
Si vemos a los libros y las bibliotecas como un paradigma de la cultura, podríamos estar tentados a pensar que nunca desaparecerán. No obstante si vamos más a la raíz de su utilidad, podríamos encontrar y construir sus sustitutos. En definitiva los libros y bibliotecas son un concepto que van más allá de sus formas. Comienza a dibujarse un cambio de paradigma con los libros y las bibliotecas digitales, sin embargo eso no significa la inminente desaparición de los libros y las bibliotecas físicas, no al menos en el mediano plazo. El poder que estos recintos y estos instrumentos poseen, permanecerá por mucho tiempo en la cultura.
Justo hace casi un año escribí en este blog un artículo “Leer en formato físico o en digital” https://rojascosme.wordpress.com/2017/10/22/leer-en-formato-fisico-o-en-digital/. En este escrito destaco las diferencias entre los formatos digitales y los físicos. En resumen los medios digitales están avanzando a pasos muy acelerados y saben que además de ofrecer muchas ventajas deben lograr la sensación de lo virtual. El lector ortodoxo se refiere a un libro de la manera poética que este le atrae; no solo por su contenido sino también por su forma, olor y hasta su textura. Esto es un reto interesante para ser tomado en cuenta, por los visionarios de nuevos esquemas.
Cosme G. Rojas D.
14 de octubre de 2018
@cosmerojas3
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